Como en las grandes tragedias griegas, lo primero es contar el final de la historia para no crear tensiones innecesarias. Luego viene lo de saber que en el cine todo está en la magia del ritmo. SOFIA COPPOLA nos encandiló cuando vimos MARIA ANTONIETA (2006) y nos decepcionó un poco cuando vimos por segunda vez LOST IN TRASLATION (2003), pero en esta su primera gran obra tiene tres*** estrellas spycin y una diosa en los altares, KIRSTEN DUNST, porque... no hace falta ser hombre para subir a una mujer a los cielos. Con ser director, vale. De haber existido el spycin cuando vimos MARIA ANTONIETA, KIRSTEN DUNST ya tendría plaza en nuestro particular Olimpo, pero no menos mérito tiene el destacar levemente de entre las cinco hermosas hermanas, protagonistas en grupo.
O enseguida cuatro, porque la también guapísima Cecilia se queda fuera de juego al comienzo mismo de la historia.
Habrá quien vea en esta película una "esteticada" (menudo palabro) o un pase de diapositivas, pero yo digo que es cine y grande por esos dos argumentos que he señalado al principio: porque tiene ritmo y porque es tragedia.
El contraste entre el grupo de hermanas y los cuatro adolescentes soñadores es la base sobre la que se establece el nudo fatal del encuentro entre el guaperas y Lux:
Deliciosa es también la conexión musical entre el grupo de adolescentes y el grupo de recluidas a través del teléfono y el tocadiscos:
Tremenda la vieja historia de seducción y abandono del don Juan:
SOFIA COPPOLA dirigió esta preciosidad con 28 añitos. Y si no fuera porque los directores no pueden ir al cielo, seguro que tendría un hueco allí. A ver si consigue rodar una película con ella misma de actriz y la subimos otro día. De momento voy a buscar SOMEWHERE (2010) y THE BLING RING (2013) a ver si ha conseguido la misma magia que con THE VIRGIN SUICIDES y MARIA ANTONIETA.
Capítulo aparte merece la música de AIR pero eso mejor sería tratarlo otro día en la spyMUSIC...
(vista el 11 de enero del 2015)
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