Domingo por la noche, ganas de descansar y de no pensar en problemas. Programo esta peliculilla recomendada en la red por algún friki internetero y..., ay, en vez de huir de los problemas me creo un nuevo problema, un grave problema: yo amo a google, google me ha cambiado la vida, google me la da todo, etc. pero..., ah, ah, no, no, mal cine no, convencionalismos no por favor.. Google nunca debería haber permitido esta película. Es un borrón en su imagen, una aguja clavada en mi amor por google.
El autor de este atentado es un tal SHAWN LEVY que por lo que veo es especialista también en desprestigiar al cine americano (todas esas noches terribles en los museos son suyas...). Ay, cómo me duelen también las películas que desprestigian al gran cine americano. Ya lo sé. Hay muchas, a patadas. Butifarras como esta que parece bien hechs, que te divierte en su primera mitad, que tiene sus gags graciosos y que parece que te van a resolver la noche del domingo. Pero no. No. Al final te la empeoran. Y te vas con cara de tonto a la cama.
Y de preocupación...: porque a la que ves el urbanismo google, ay ay ay, lo mismo tienes pesadillas peatonales.
Cero pelotero spypcin y fuera del DD (suerte tenéis que aún no os la hubiera pasado).
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